MOMENTOS OLÉ

La felicidad, cuestión de hábitos

Si algo tenemos claro las personas, es que todas buscamos encontrar la felicidad. Es uno de los asuntos más relevantes de nuestra vida y al que la filosofía, la psicología y la ciencia llevan siglos dando vueltas, porque más bien sabemos poco de ella. Nuestra naturaleza inconformista y la percepción que cada uno tenemos de qué nos trae felicidad hacen su búsqueda más complicada. Los últimos estudios han concluido que tenerla como meta es un “invento” reciente y que no debemos buscarla, sino que se encuentra. Desde @LasToreras te proponemos una lista con una serie de hábitos gracias a los cuales encontrar la felicidad es más fácil 😉 Sigue leyendo y te lo contamos.

La ciencia nos dice que cada uno de nosotros tenemos una determinada predisposición genética innata, por así decirlo, una tendencia natural a volver al nivel de felicidad que tenemos genéticamente marcado, y una característica humana llamada adaptación hedonista para adaptarnos a las circunstancias de la vida. Es curioso, por ejemplo, el caso de personas que han ganado la lotería y a las que se ha estudiado para comprobar que, tras un ascenso inicial del estado de ánimo, los ganadores regresaron a sus niveles de referencia estándar en cuanto a felicidad.

Parece que todo pasa por hallar el equilibrio entre esperar demasiado y sentirnos frustrados si no lo conseguimos y confiar poco o nada de la vida. Porque, aunque la felicidad no es un destino, sino más bien un camino, en realidad no es tan difícil hallarla como pensamos. Estudios muestran que podemos alcanzarla adoptando una serie de pequeños cambios. Desde @LasToreras te proponemos algunos hábitos que ayudan a sentir felicidad:

– Pasar tiempo con los tuyos

Al compartir tiempo con los nuestros liberamos oxitocina en el cerebro y esto todavía tiene un efecto mayor en nuestra salud y bienestar emocional a medida que vamos envejeciendo. Como cuando disfrutas de un vermú casero con tus @LasToreras favoritas.

– Escuchar música

Llevamos la música en las venas, desde la cuna. Según revelan estudios científicos, los bebés, en los primeros meses de vida, tienen la capacidad de responder a melodías antes que a una comunicación verbal de sus padres. Los sonidos suaves los relajan y liberan dopamina en el cerebro, causante del placer.

-Rodearse de personas alegres

Es contagioso. Cuando estás con personas positivas, su energía se propaga como la pólvora y nos hacen dibujar una sonrisa. Aunque tengamos problemas o sea un día difícil, su espíritu constructivo nos ayuda a encarar mejor el día a día.

-Aprender una nueva actividad

Cuando aprendemos una nueva habilidad, ya sean manualidades, un idioma, tocar un instrumento musical o mejorar nuestras técnicas culinarias, estamos cambiando las conexiones de nuestro cerebro generando nuevos patrones neuronales.

-Encontrar tiempo para uno mismo

Tan importante es rodearse de personas que nos hacen sentir bien como ser capaces de encontrar algún momento del día para tomarse tiempo para uno mismo y recargar energías.

 

-Comer en compañía

Según confirman estudios de psicología, alrededor de la mesa tienen lugar momentos que favorecen la activación del sistema de endorfinas, que se activan cada vez que tenemos relaciones sociales satisfactorias que implican contacto físico tales como las caricias y los abrazos. Nada como una comida en familia disfrutando de tus @LasToreras 😉

-¡Disfrutar más y pensar menos!

Todo lo anterior solo funciona cuando nos relajamos, deceleremos el ritmo frenético que a veces llevamos, dejamos de perseguir la felicidad a un grado poco realista y no nos obsesionamos. Parece que ahí reside el secreto: la felicidad no se busca, ni se persigue ni se conquista; con la felicidad se tropieza…

Así que ya lo sabes: recuerda acompañar tus momentos de unas @LasToreras y disfrutar de los pequeños placeres de la vida, que al final son los más grandes 😉