Los encurtidos constituyen un acompañamiento ideal para dar vida a gran cantidad de platos y recetas: sándwiches, ensaladas, hamburguesas o salsas. Además, suponen un aperitivo perfecto para compartir en cualquier momento y lugar y sirven para abrir boca antes de dar paso a una comida o celebración. Sin embargo, existen varias creencias erróneas o mitos comunes que conviene aclarar.
Deben conservarse en frío: Aunque los encurtidos pueden guardarse fuera del refrigerador hasta su consumo, (en un lugar fresco y oscuro, como una despensa o un armario), una vez abiertos es recomendable refrigerlos, ayudando a mantener su textura y sabor y previniendo el crecimiento de bacterias no deseadas.
No tienen caducidad: Si bien los encurtidos tienen una larga vida útil debido a los métodos de conservación empleados, eventualmente pueden deteriorarse. La calidad del producto puede disminuir con el tiempo, por lo que es importante prestar atención a la fecha de caducidad y almacenarlos adecuadamente.
Los encurtidos son siempre ácidos y amargos: Aunque muchos encurtidos tienen un sabor ácido debido al vinagre utilizado en el proceso de conservación, no todos son necesariamente amargos. De hecho, algunos pueden tener sabores más dulces o agridulces, dependiendo de los ingredientes y especias utilizados en el proceso.
Son poco saludables: Aunque algunos encurtidos pueden contener niveles moderados de sal, también ofrecen beneficios para la salud. Así, son una fuente baja en calorías y pueden proporcionar probióticos, que facilitan el tránsito intestinal, cuando se preparan mediante fermentación.
Una larga tradición histórica
Los encurtidos han sido una parte integral de la alimentación humana durante siglos. Se cree que la práctica de conservar alimentos mediante la fermentación y la inmersión en líquidos ácidos se originó como un método para prolongar la vida útil de los productos perecederos miles de años atrás. A lo largo de la historia, diversas culturas han desarrollado sus propias versiones de encurtidos, creando una rica tradición gastronómica que se ha transmitido de generación en generación.
Y es que los encurtidos han sido una forma importante de aprovechar los alimentos de temporada durante todo el año. Como dato curioso, marineros y navegantes empleaban esta técnica de fermentación natural en sus largos viajes a ultramar, donde no podían llevarse consigo alimentos frescos.
Nuestra amplia variedad
Una de las razones por las que los encurtidos se han convertido en el aperitivo perfecto es la diversidad de sabores que ofrecen. Desde el agridulce de los pepinillos hasta el picante de las guindillas encurtidas, hay opciones para satisfacer todos los gustos. Descubre nuestra amplia gama de Las Toreras y disfruta de un aperitivo versátil, saludable y delicioso.