Fue Colón quien descubrió las guindillas en su primer viaje y quien las introdujo en nuestro país, hasta convertirse en un elemento esencial de nuestra gastronomía, como es hoy en día. Además de su utilización en numerosos platos e incluso como aperitivo en solitario, las guindillas nos aportan importantes beneficios para la salud que es conveniente conocer.

1. Ayudan a adelgazar. Precisamente el picor de las guindillas es beneficioso para el estómago. La capsaicina, el componente causante del picor, provoca un aumento de la temperatura corporal. Esto hace que el cuerpo necesite más energía y, por lo tanto, quema calorías. Es decir, si lo incluimos en la dieta, puede ayudarnos a adelgazar.

2. Son fuente de Vitamina A, E, C, además de hierro.

3. Previenen úlceras. Al contrario de lo que se cree, la guindilla no es perjudicial para el estómago, sino que ayuda a prevenir las úlceras. ¿Por qué? Porque ayuda a eliminar la bacteria que provoca las úlceras y porque es antifermentativa. Eso sí: siempre y cuando se consuman las cantidades adecuadas.

4. Tienen poder antiinflamatorio.

5. Ayudan a prevenir la arteriosclerosis y enfermedades cardiovasculares.

 

Además de estos, la Academia Italiana del Peperoncino, organización dedicada a promover este ingrediente, señala otros beneficios “curiosos” de la guindilla:

Afrodisíaco. Su alto contenido en Vitamina C favorece la producción de endorfinas.

Antidepresivo. Utilizado en China y en India desde hace cientos de años, consideran que «estimula el espíritu y la sangre».

Bronceador, gracias a su contenido en Vitamina A.

Belleza corporal. Importante acción antibactérica en cremas y jabones con este componente. Además, ayuda a eliminar las impurezas.

Belleza capilar. Los productos con este ingrediente aportan fuerza y vigor al pelo.

¡Ahora sí que no tenemos excusa para tomar unas deliciosas guindillas de Toreras!