Disfruta de un sencillo plato para sorprender al personal con una ensalada fresca y sabrosa que combina la dulzura de la manzana con el toque ácido y crujientes de los encurtidos, dando como resultado una deliciosa ensalada. Además, el toque de la vinagreta de mostaza y miel agrega un equilibrio de sabores y realza los ingredientes de temporada. Te contamos cómo prepararla.
Ingredientes
2 remolachas medianas, cocidas, peladas y cortadas en cubos
1 manzana grande, cortada en tiras finas
1 taza de encurtidos variados (pepinillos, zanahorias, cebollas, etc.), picados
1 taza de nueces o nueces pecanas, tostadas y picadas
2 tazas de hojas verdes mixtas (rúcula, espinaca, lechuga, etc.)
Para la vinagreta:
3 cucharadas de aceite de oliva extra virgen
2 cucharadas de vinagre
1 cucharada de mostaza Dijon
1 cucharada de miel
Sal y pimienta al gusto
Elaboración
En un tazón grande, combina las hojas de la ensalada, los trocitos de remolacha, las tiras de manzana y los encurtidos picados.
Añade las nueces, pícalas un poco y agrega la mezcla a la ensalada.
En un pequeño tazón, mezcla bien todos los ingredientes de la vinagreta: el aceite de oliva, el vinagre, la mostaza de Dijon, la miel, la sal y la pimienta. Bate bien hasta que la vinagreta esté bien emulsionada.
Vierte la vinagreta sobre la ensalada y revuelve para asegurarte de que todos los ingredientes quedan bien cubiertos por la salsa.
Sirve la ensalada en platos individuales y disfruta de este plato otoñal lleno de sabor y vitaminas. ¡Que aproveche!